Ciudad de México a 4 de marzo 2021 .-

El Día Internacional de la Mujer es una fecha de gran importancia a nivel mundial y una muestra de las grandes luchas que la mujer ha emprendido a lo largo de la historia de la humanidad.

En nuestro país, décadas de buscar los mismos derechos, las mismas oportunidades y alcanzar una igualdad sustantiva.

Para quien piense que la lucha de las mujeres es algo nuevo está completamente errado, y particularmente para aquellos que lucran políticamente con un movimiento que tiene mucha más historia que unos cuantos políticos que quieren tomar la bandera del tema sin conocer.

Yo soy mujer, soy madre, activista, y me preocupan las causas de mi comunidad, tanto en la arena social como en la arena política.

Como mujer, entiendo los desafíos a los que nos enfrentamos todas, no solo las amas de casa, las trabajadoras, las empresarias, las políticas, las comunicadoras, y todas aquellas mujeres que diariamente luchamos por un país mejor.

Además de entender la causa de las mujeres, entiendo la causa humanista, y que los derechos no deben ser de un grupo, de un género o de alguien en particular, los derechos son y deben ser de todas y todos, porque somos iguales. Uno de los grandes retos que tenemos como mujeres es la violencia, una violencia que afecta a todas por igual.

Pero también debemos considerar que esta violencia no es solo responsabilidad de un gobierno u otro, como sociedad debemos asumir que también tenemos una gran culpa en esta grave situación. Esto debemos trabajarlo desde el núcleo de muchas familias en nuestro país, trabajarlo como madres y padres, como abuelas y abuelos, y como tutores y tutoras con nuestras niñas y niños para que eviten desarrollarse en ambientes que propiciarán la violencia en un futuro.

Desde nuestras casas podemos trabajar, pues es responsabilidad tanto de hombres y mujeres trabajar para evitar que la violencia pueda presentarse. La violencia de género no se combate únicamente con cárcel, causas penales y policías, si no también con trabajar para que nuestros valores familiares en nuestras comunidades se desarrollen en una cohesión social que permita que esto disminuya.

Recordar el Día Internacional de la Mujer es recordar que todas y todos tenemos la responsabilidad de mejorar nuestro entorno, de trabajar unidos y de tener un mejor país. Hoy por hoy, México ha desarrollado un marco legal que protege y defiende a la mujer, a partir de ello es nuestra responsabilidad aplicarlo y desde casa trabajar para que todas y todos podamos alcanzar una vida libre de violencia, con más humanidad y valores sociales que prioricen la unidad.

La conmemoración de algo tan importante como este día es inmortalizar las grandes luchas y causas que como mujeres hemos emprendido, pero nunca pensar que somos superiores a otros géneros, si no que somos iguales, y que todo ser humano tiene la misma capacidad. Las grandes causas que pasan a la historia son aquellas que no discriminan a nadie, que no se creen superiores y no sesgan a otros movimientos, las causas que se quedan son las que nos enseñan que todos somos seres humanos.