El Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas convocó una sesión extraordinaria este domingo por la tarde, a solicitud de Irán, en medio de la creciente tensión internacional generada por los recientes ataques a instalaciones nucleares en el país persa.
La reunión fue programada para las 3:00 p.m. hora local (20:00 GMT), según confirmó la presidencia del Consejo, que en esta ocasión está a cargo de Guyana. Es importante destacar que este tipo de encuentros en fin de semana o días festivos son sumamente inusuales y solo se convocan en situaciones de máxima gravedad, como conflictos bélicos o invasiones armadas. La gravedad del escenario actual ha llevado al Consejo a romper su rutina habitual para abordar la situación iraní por tercera vez en menos de dos semanas.
Desde los ataques aéreos perpetrados por Israel contra instalaciones nucleares en Irán, seguidos por la participación militar de Estados Unidos, Teherán ha solicitado varias sesiones de emergencia. La primera se realizó el viernes 13, y la segunda, una semana después. Sin embargo, ninguna de estas reuniones ha logrado emitir resoluciones o declaraciones conjuntas, debido a las profundas divisiones internas del órgano.
El derecho de veto de Estados Unidos, miembro permanente junto a China, Rusia, Francia y Reino Unido, ha sido un factor determinante para impedir cualquier resolución que condene las acciones militares recientes. Mientras Rusia y China mantienen una postura más alineada con Irán, las potencias occidentales han mostrado un respaldo tácito a los ataques, justificando sus acciones en la necesidad de evitar que Irán desarrolle armas nucleares.
Por su parte, los gobiernos de Francia y Reino Unido han evitado condenar directamente los bombardeos liderados por Estados Unidos. En cambio, han utilizado sus redes sociales para expresar su preocupación por el programa nuclear iraní, sin pronunciarse sobre la legalidad o legitimidad de las acciones militares.
EJ
