Foto: Intercam.com.mx

La Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) anunció este jueves la intervención gerencial temporal de CIBanco e Intercam Banco, luego de que el Departamento del Tesoro de Estados Unidos los relacionara con operaciones presuntamente vinculadas al lavado de dinero procedente del narcotráfico, en particular con redes de tráfico de fentanilo.

La decisión, adoptada por la Junta de Gobierno de la CNBV, se fundamenta en el artículo 129 de la Ley de Instituciones de Crédito y tiene como objetivo proteger los intereses del público ahorrador y de los acreedores. La medida implica la sustitución de los órganos administrativos y representantes legales de ambas instituciones financieras.

Asimismo, en un plazo de 21 días, se prohibirá cualquier transacción entre estas entidades y sus contrapartes en Estados Unidos. Tanto CIBanco como Intercam negaron categóricamente su participación en actividades ilícitas.

CIBanco afirmó cumplir estrictamente con todos los lineamientos regulatorios establecidos por las autoridades. Por su parte, Intercam aseguró que sus operaciones continúan con normalidad y que los depósitos de sus clientes están protegidos por el Instituto para la Protección al Ahorro Bancario (IPAB), mientras que sus instrumentos de inversión cuentan con respaldo de Indeval.

En respuesta a los señalamientos estadounidenses, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) afirmó que no se han presentado pruebas concretas que sustenten las acusaciones hechas por FinCEN.

Esta postura fue respaldada por la presidenta Claudia Sheinbaum, quien en su conferencia matutina afirmó:
“No hay pruebas, son dichos. ¿Dónde está el lavado de dinero? Si hay pruebas, se actúa. No hay impunidad, no importa quién sea.”

La Asociación de Bancos de México (ABM) descartó que exista un riesgo sistémico derivado de esta situación. En un comunicado, la ABM señaló que la intervención busca brindar certeza y que el sistema bancario mexicano se mantiene sólido, bien capitalizado y con niveles históricos de liquidez.

“La medida aporta claridad y estabilidad, sin interrumpir la operación regular de los bancos involucrados”, afirmó la ABM, que además reiteró el compromiso del sector con la prevención de actividades ilícitas y el cumplimiento de las normativas internacionales.

Es importante destacar que esta intervención no implica una quiebra ni la suspensión de operaciones. Las autoridades mexicanas y las propias instituciones han hecho llamados a la calma, asegurando que los recursos de los clientes están protegidos y que las instituciones continúan operando bajo un esquema de vigilancia reforzada.

EJ.