El gobierno mexicano, bajo la presidencia de Claudia Sheinbaum, ha lanzado un plan integral para atender a los mexicanos deportados desde Estados Unidos, en respuesta a la creciente repatriación. En colaboración con el sector empresarial y el Ejército Mexicano, se están tomando medidas para ofrecer apoyo humanitario y oportunidades laborales a los deportados.
En primer lugar, se están construyendo nueve albergues a lo largo de la frontera norte, los cuales estarán listos en los próximos días. Estos centros, que estarán operados por las fuerzas armadas, brindarán alojamiento temporal, alimentación, y transporte para los migrantes repatriados, a quienes se les ofrecerán servicios básicos para facilitar su reintegración al país.
Por otro lado, el Consejo Coordinador Empresarial (CCE) ha anunciado una oferta de 35,000 empleos en sectores como la construcción, servicios, y manufactura. Esta bolsa de trabajo busca ofrecer una alternativa económica a los deportados, permitiéndoles rehacer su vida laboral en México tras su repatriación. La presidenta Sheinbaum agradeció la cooperación del sector empresarial y destacó que este esfuerzo conjunto facilitará la adaptación de los migrantes a su nuevo entorno.
Este plan refleja la determinación del gobierno de México para enfrentar los retos de la migración de manera integral, ofreciendo no solo atención humanitaria, sino también oportunidades para la reactivación laboral de los deportados.
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