La cancillería brasileña repudió este viernes los recientes ataques del Ejército israelí a civiles que esperaban en la Franja de Gaza el reparto de ayuda humanitaria, y aseguró que «la acción militar» del gobierno de Benjamín Netanyahu «no tiene límites éticos ni legales».
«El gobierno de Netanyahu demuestra una vez más, a través de acciones y declaraciones, que la acción militar en Gaza no tiene límites éticos ni legales. Y corresponde a la comunidad internacional detener y, solo entonces, evitar nuevas atrocidades. Con cada día de vacilación, morirán más personas inocentes«, declaró el gobierno izquierdista de Luiz Inácio Lula da Silva en un comunicado. De momento, los ataques dejaron más de 100 muertos y 750 heridos.
«La humanidad le está fallando a Gaza»
«La humanidad le está fallando a los civiles de Gaza. Y es hora de evitar nuevas masacres», agregó.
Lula es uno de los líderes latinoamericanos más críticos con la desmedida ofensiva miliar de Israel en Gaza, tras los ataques de Hamás, que por ahora han dejado más de 30.000 civiles palestinos muertos, entre ellos 12.000 niños.
Ambos países están inmersos en una crisis diplomática después de que Lula comparara la masacre de palestinos con los crímenes de Adolf Hitler contra los judíos.
En su comunicado de este viernes, Brasilia deplora además la «inacción de la comunidad internacional» ante esta tragedia, que sirve de que «incentivo velado para que el gobierno de Netanyahu siga atacando a civiles inocentes e ignorando las normas básicas del derecho internacional humanitario».
«Las declaraciones cínicas y ofensivas a las víctimas del incidente, realizadas horas después por un alto funcionario del gobierno de Netanyahu, deberían ser la gota que colma el vaso para cualquiera que realmente crea en el valor de la vida humana», remata el texto oficial.
Israel declaró persona no grata a Lula por sus comentarios, mientras que desde Brasilia denunciaron una campaña de «mentiras» y expresiones «irrespetuosas» en contra del mandatario, pues desde cuentas de organismos del Gobierno de Netanyahu fue acusado de antisemitismo.