Ciudad de México. En una jornada legislativa marcada por los enfrentamientos verbales, la Cámara de Diputados dio luz verde en lo general al dictamen de la Ley de Ingresos de la Federación para el ejercicio fiscal 2026. La aprobación se alcanzó con 349 votos favorables por parte de Morena y sus aliados, frente a 128 sufragios en contra de la oposición.
La sesión, que arrancó con la promesa de conducirse de forma ordenada, pronto se convirtió en un campo de batalla política. Las descalificaciones, señalamientos por supuestos manejos indebidos de deuda y hasta acusaciones de traición, marcaron el tono del debate.
Desde el inicio, la discusión avanzó hacia la presentación de reservas, en las que se inscribieron más de 70 oradores. Uno de los puntos que generó mayor atención fue la propuesta para modificar el esquema de retención del IVA por parte de las aseguradoras, al argumentarse que muchas no cumplen con sus obligaciones ante la Tesorería de la Federación.
La discusión no solo giró en torno a los aspectos técnicos del paquete fiscal, sino que también derivó en ataques personales. Leonel Godoy, legislador de Morena, arremetió contra el PRI al acusar a su dirigente, Alejandro Moreno, de buscar apoyo extranjero para intervenir en la política nacional. “Vamos a ganar en 2027 con votos, no con injerencias”, sentenció, mientras sus compañeros coreaban “¡Alito vende patrias!”.
La respuesta no se hizo esperar. Rubén Moreira, coordinador del PRI, calificó a los morenistas como provocadores y confrontó directamente a Godoy en su curul. Más tarde, Alfonso Ramírez Cuéllar, también de Morena, defendió el dictamen y aseguró que el gobierno federal busca ingresos suficientes sin caer en despilfarros, además de reforzar la lucha contra la evasión fiscal y el uso de facturas falsas.
En tono desafiante, Ramírez Cuéllar hizo alusión directa al gobernador de Nuevo León, Samuel García, acusándolo de «presumir» sus habilidades en prácticas de facturación simulada. También lanzó retos a tribuna a miembros del PRI y PAN. “¡Vente, Moreira! ¡Tú también, Margarita!”, provocó desde el pleno.
Ambos aludidos subieron a tribuna a responder. Moreira ironizó sobre las “frustraciones” del oficialismo, mientras que Margarita Zavala cuestionó la capacidad de Morena para resolver sus propios conflictos: “No usen a la oposición para encubrir lo que no han podido arreglar internamente”.
El debate se intensificó con intervenciones como la de Elías Lixa, del PAN, quien arremetió contra Ramírez Cuéllar calificándolo como “provocador nato” y “enano político”.
En cuanto al contenido económico del dictamen, Morena detalló que se espera un incremento de más de 542 mil millones de pesos en los ingresos federales respecto al año en curso. También se incluye una ampliación en los productos con tasa cero de IVA, especialmente los relacionados con la gestión menstrual.
La oposición, sin embargo, criticó duramente el incremento de impuestos y el déficit presupuestal proyectado. Roberto Sosa, diputado panista, advirtió que mientras el gobierno pretende recaudar 8.4 billones de pesos, el gasto proyectado asciende a 10.2 billones, lo que generará un déficit de 1.8 billones. Con cifras en mano, anticipó que la deuda pública podría elevarse hasta los 20 billones de pesos.
La discusión continuará en lo particular, con reservas que se prevé se debatan hasta altas horas de la noche. Todo indica que la aprobación final aún traerá más choques entre las bancadas.